Cualquier persona que se haya acercado hoy al mar con la intención de surfear, seguramente haya vuelto a su hogar con la sensación de un día más. Para Santiago Dellepiane no fue un día más, fue uno de esos días, no por la magnitud del swell, pero si por el olón con que tuvo la suerte de conectar. Charlamos con "Delle" para que nos cuente como fue el día de hoy y el momento en el que conecta con esta hermosura de ola, sin lugar a dudas de las mejores que vimos salir.
"Despues de haber estado 3 inviernos y 2 veranos viviendo en Indonesia, uno solo quiere buscar tubos, riesgos y shallow waves. En esta mañana nos levantamos junto a Alejandro Santander, mi alumno, con la intención de encontrar una condición que nos motive, un banco razo, que esté funcionando y si es posible que tire tubos. Luego de recorrer varios picos que nuestra hermosa ruta 10 tiene, llegamos a un lugar que tenía las condiciones como para que salgan olas con tubos, pero las mismas no aparecían. Mientras imaginábamos que otro lugar podría estar mejor, esperábamos que la magia ocurra y esa ola aparezca. Pasaron 7 minutos y nada, a los 10 minutos decidímos irnos, al poner primera, marca una serie, 30 segundos más tarde estábamos cambiándonos, más que excitados ante tal perfección de ola. Al minuto estábamos dentro del agua, solos, él y yo, algunas aves nos acompañaban. Surfeamos unos veinte minutos pero ninguna ola era como las que habíamos visto antes de entrar.
De repente, un pico bien pronunciado, proyectado, una manga que era perfecta, así que pensé, me voy a poner bien deep y que venga. Tuki, taca, tubazo ! Metía la mano en el agua y tocaba la arena, fue algo increíblemente lindo. Pasaron tres meses desde que llegué y no había conectado con una condición así. Una ola orillera que abre y poderosa, con Alejandro no lo podíamos creer".
Fotos © Nicolás Albano